Cómo funciona
Última actualización en: 18 Diciembre 2024
Última actualización en: 18 Diciembre 2024
Usted encontrará en la página de inicio una serie de rutas de aprendizaje que le ayudarán a adquirir conocimientos técnicos especializados en un tema específico. Algunas de estas rutas de aprendizaje se enfocan en diferentes aspectos de un tema relacionado, mientras que otras son independientes. En el caso de algunas de las rutas de aprendizaje vinculadas, puede existir una relación secuencial entre ellas, en la cual se cubren primero las habilidades fundamentales y se permite el desarrollo de habilidades de análisis y soporte más profundas. Su primer paso será leer el módulo de Introducción de la ruta de aprendizaje que ha escogido, el cual contiene una descripción general (una explicación de la habilidad que se está desarrollando, su relevancia para la sociedad civil, los medios de comunicación y otros contextos de usuarios de alto riesgo para los que los protectores digitales están al servicio), los requisitos previos que se supone que debe cumplir antes de iniciar la ruta de aprendizaje y los dispositivos y/o el software que necesita. Usted debe considerar si la ruta de aprendizaje de su interés es relevante para su trabajo y las comunidades a las que brinda soporte, si cuenta con los requisitos previos o puede obtenerlos antes de seguir la ruta de aprendizaje, y si tiene a su disposición el hardware y el software necesarios.
Posteriormente, la ruta de aprendizaje se divide en módulos secuenciales. La mayor parte del contenido y los recursos de aprendizaje, así como los ejercicios de práctica y verificación de habilidades, se encuentran en las secciones de los módulos. Se dividen en las siguientes secciones:
Los subtemas dentro de una ruta de aprendizaje pueden incluir secciones centradas en plataformas de sistemas operativos individuales. Puede considerarlos como “sabores” individuales de la ruta de aprendizaje y puede decidir centrarse en uno o varios entornos de sistemas operativos en función de sus necesidades.
En general, consideramos que todos los módulos de una ruta de aprendizaje son relevantes para un protector digital, sin embargo, puede haber casos en los que un módulo esté marcado como opcional para que el aprendiz lo complete.
El conocimiento técnico especializado (STE) no consiste sólo en conocimientos y hechos, sino también en habilidades que requieren práctica y que necesitan mantenerse actualizadas. A veces puede resultar difícil para un aprendiz determinar si domina una habilidad con la suficiente solidez como para poder utilizarla para ayudar a otras personas. Es por ello que cada ruta de aprendizaje contiene una serie de ejercicios de verificación de habilidades, generalmente al menos uno por módulo, como se ha mencionado anteriormente. Se trata de preguntas prácticas que buscan asemejarse al tipo de trabajo que realizaría un protector digital utilizando STE cuando da soporte a sus beneficiarios. Además, se complementan con ejercicios prácticos, lecturas y pequeños cursos.
Como parte de Infuse, los aprendices también pueden trabajar con mentores que verificarán hasta qué punto han comprendido el contenido y hasta qué punto están preparados para dar soporte a otros utilizando los conocimientos y habilidades que han aprendido. De todos modos, dado que no todos los aprendices pueden recibir el soporte constante por parte de los mentores, muchos de los ejercicios de verificación de habilidades también pueden ser realizados por los aprendices trabajando por su cuenta o con la ayuda de un colega protector digital. Obtenga más información sobre cómo trabajar con un mentor aquí.
Después de trabajar a lo largo de una ruta de aprendizaje y cumplir los criterios de validación (verificaciones de habilidades) mediante la verificación de un mentor o un colega, se considera que usted ha obtenido la insignia correspondiente a esa ruta de aprendizaje. Cuando haya iniciado sesión en el sitio web de Infuse, usted podrá marcar cada módulo que haya completado en la parte inferior de la página del módulo. Hacer esto le permite realizar un seguimiento de su progreso.
Una vez que todos los módulos de una ruta de aprendizaje hayan sido marcados como completados, usted podrá acceder a un certificado de insignia específico para esa ruta de aprendizaje yendo a la página “Insignia” que aparece en el menú desplegable en la esquina superior derecha de la página web. Recuerde que, antes de reclamar una insignia, debe asegurarse de haber pasado algún tipo de evaluación por parte de su mentor, colegas o autoevaluación.
Infuse está dirigido a una audiencia global, y la inclusión de una diversidad de idiomas es fundamental. Las seis rutas de aprendizaje iniciales (Infraestructura maliciosa, Detección de malware, Análisis de malware, Fundamentos de aplicaciones web, Evaluación de aplicaciones web y Preparación, Análisis forense y Respuesta a incidentes de ataques a aplicaciones web) están disponibles en árabe, inglés, francés y español (seleccione un idioma haciendo clic en el icono del globo que aparece en la esquina superior derecha del sitio web). Tenga en cuenta que sólo las rutas de aprendizaje en sí están traducidas y que los recursos externos vinculados desde las rutas de aprendizaje suelen estar en inglés, aunque algunos también están disponibles en otros idiomas. Al final de cada módulo, en las secciones de recursos de aprendizaje se especifica los idiomas en los que estaba disponible cada recurso en el momento de elaborar la ruta de aprendizaje. Algunos de los recursos vinculados a las rutas de aprendizaje y otras directrices de la página web también estarán traducidos en diferentes idiomas más adelante en 2024.
Trabajar de manera eficaz como protectores digitales implica mucho más que habilidades y conocimientos técnicos. Dar soporte a activistas, periodistas, figuras públicas, movimientos sociales y sus organizaciones significa comprometerse políticamente con sus posturas de defensa e implicarse empáticamente con sus experiencias vividas de riesgo y sus inevitables líos con la tecnología. Las rutas de aprendizaje de Infuse fueron escritas y elaboradas por protectores digitales con experiencia en equilibrar las necesidades técnicas, interpersonales y pedagógicas en su trabajo de apoyo en comunidades y organizaciones impulsadas por la defensa. Por tanto, las guías incluyen contenidos y módulos sobre seguridad operativa, habilidades interpersonales y consideraciones pedagógicas para relacionarse con sus clientes. Se trata de habilidades integrales y le insistimos en que no las pase por alto para dedicarse a temas técnicos. Al abordar estos temas, piense en su propio contexto personal y cultural. Todos podemos hacer un mejor trabajo con empatía, cuidado y diligencia cuando trabajamos con personas de alto riesgo, y esperamos que algunas de las directrices de las rutas de aprendizaje sean útiles para informar sobre las estrategias para hacerlo. ¡Que sus mejores valores e intenciones impregnen su trabajo como protector digital!
A lo largo del texto de este recurso, puede que perciba que hemos seleccionado cierto lenguaje que puede o no parecerle adecuado. Reconocemos que algunas de estas elecciones no resultarán del agrado de todos y queríamos explicar algunas de las consideraciones que hay detrás de dichas elecciones. También reconocemos que algunos de los matices detrás de estas decisiones pueden no mantenerse en idiomas distintos del inglés, y hemos intentado trabajar con traductores profesionales para hacer elecciones lingüísticas igualmente cuidadosas en esas versiones.
“Clientes” - Como es de suponer, un protector digital trabaja con y para alguna otra persona. Algunas formas de describir a esa persona/grupo podrían ser beneficiarios, interlocutor, miembro de la comunidad, víctima u objetivo (ver más abajo). Aunque “Cliente” nos resultaba un término un tanto frío y comercial, apreciamos la claridad que aporta sobre la relación del servicio prestado, para destacar la naturaleza profesional del trabajo de los protectores digitales, y queríamos evitar la carga de valor y el marco humanitario que implica el término “beneficiario”.
(no) “Víctimas” - Hemos evitado en su mayoría el uso del término “víctimas” (u “objetivo”) para referirnos a la persona objeto de spyware, malware u otros incidentes negativos. Consideramos que este término es estigmatizante y condescendiente. En su lugar, hemos optado por variaciones un poco más expresivas como “la persona que recibió el correo electrónico de phishing”, o “el propietario del dispositivo infectado”, o simplemente “su cliente” (ver más arriba).
Puede que encuentre un uso intercambiable de los términos aprendiz y practicante en referencia al público al que van dirigidas estas rutas de aprendizaje. Esperamos que el público de este material ya esté practicando la protección digital y la asistencia técnica a personas en riesgo, por lo que consideramos que “practicante” es un reconocimiento a su experiencia y contribución. Asimismo, todos somos aprendices permanentes, y sí, hemos querido destacar que éste es un momento y una oportunidad para mejorar las habilidades y dedicarle tiempo a priorizar el aprendizaje.